Comunicado de prensa sobre falta de control nocturna.

El Comité Enrique Betolaza de la Unión Cívica Radical manifiesta su preocupación porque durante la Fiesta de la Primavera se vendieron bebidas alcohólicas a menores de entre 11 y 14 años, en una “previa “ convocada por un boliche, supuestamente para que los chicos se divirtieran sanamente.
Hemos tomado conocimiento de lo ocurrido a través de padres que se sienten defraudados, ya que permitieron que sus hijos concurrieran al evento convencidos de que en el mismo se iban a respetar las normas vigentes, pero no fue así, a pesar de haber observado la presencia policial en el lugar.
Una vez más los encargados de controlar no lo hicieron, al menos en ese sitio donde se congregaban tantos chicos.
Las normas rigen para todos: el empresario debe respetar la prohibición de expendio de bebidas alcohólicas a menores; las autoridades encargadas de controlar el respeto a las normas deben cumplir con su función – Inspección General y Policía Comunal- y el Servicio de Promoción y Protección de los Derechos del Niño también, si no hubiera estado ausente, hubiera observado que muchos niños salían alcoholizados del evento, que no se desarrolló un solo día. Si en el primero hubieran estado presentes, el hecho no se hubiera repetido los días posteriores.
Es cierto que según declaraciones del Jefe de Policía Comunal se detectaron dos casos de venta de alcohol a menores y se realizó un procedimiento por drogas, pero no es verdad lo que afirmó el mismo funcionario de que los controles programados junto a la Municipalidad se cumplieron correctamente, a no ser que se haya programado el control de algunos y no de otros.
Este no es un tema menor, ya que estamos hablando del cuidado de la salud de niños, que no concurrieron alcoholizados al lugar de esparcimiento, sino que consumieron bebidas no permitidas que se expendían en el local.
Si cada uno de los responsables hubiera cumplido con sus obligaciones, nada de esto hubiera ocurrido.
Para que todos gocemos de nuestros derechos, todos debemos cumplir con nuestros deberes, tan sencillo como eso.
Si hay funcionarios que no pueden, no saben o no quieren cumplir con sus obligaciones es porque no son idóneos para el desempeño del cargo, único requisito exigido por nuestra Constitución Nacional.